Horóscopo Chino Caballo

Estamos ante el espíritu más libre del horóscopo chino, el emisario del verano. Ma es el equivalente del signo de Géminis, y dota a los que nacen en su año de optimismo y un hambre de libertad. Y es que los Caballo no saben quedarse quietos, y se demandan todo el tiempo moverse, la mudanza constantes de sitios físicos, de estados de ánimo, de niveles espirituales… Su vida es una carrera sin reposo.

Los Caballos se mueven inquietos a lo largo de sus vidas, y relacionan el descanso con la pérdida: día en que no se posible trasladarse, día que sientes perdido. Son, por ello, grandes trabajadores, entusiastas, que creen tanto en soñar como en el sentarse para realizar los sueños. No conocen la derrota, y creen que todo obstáculo sólo requiere de una mayor preparación para ser resuelto.

El problema con los nativos de este signo es que creen en el éxito, y lo persiguen sin fin: si las cosas no salen como ellos quieren, se frustran y se culpan, y pueden llegar a la amargura si no se sus sueños realizados de la manera en que lo desean.

Con los Caballos el amor es un sueño, pues se lanzan sin reflexión en pos de sus objetivos, lo que, sin embargo, puede llevar a problemas, pues un hogar y una familia se construyen con sueño, pero también con dedicación y pragmatismo. Hay que refrenar su entusiasmo y poner sus pies en la Tierra. No es difícil, pues son amorosos y comprensivos.

El Caballo según sus elementos:
Caballo de Fuego: De indomable voluntad y energía, su entusiasmo no conoce límites.
Caballo de Madera: Es paciente, pero defiende su independencia a ultranza. No es fácil negociar con él.
Caballo de Tierra: El que abre caminos en donde nadie más ha osado poner el pie. Líder por naturaleza.
Caballo de Metal: Respeta la autoridad, pero es reflexivo, y tiene ideas claras sobre la vida y el amor.
Caballo de Agua: Gusta de los cambios, de las revueltas, de la incertidumbre. Se adapta a toda circunstancia.