La Naturaleza de un Vidente

¿Qué es la Videncia y de Dónde Viene?

La videncia es la capacidad de adquirir información de seres, objetos o entes diversos, sin la intervención en el proceso de los clásicos cinco sentidos que todos conocemos. En la videncia se encuentra activo el sexto sentido, ese con el que muy pocas personas cuentan. Con frecuencia, a esta virtud se la conoce como percepción extrasensorial. Las facultades de un vidente son, por lo general, innatas, aunque también pueden desencadenarse a raíz de diversos incidentes o en base a la preparación psíquica de los iniciados.

La Videncia Como Realidad de un Mundo sin Fronteras

Diversas explicaciones se han aventurado en torno al tema de la videncia, pero muchas veces la verdad de su concepto escapa a la comprensión humana. Ante el asombro de incrédulos que intentarán buscar una razón dentro de la caja de prejuicios que tienen en su mente, un vidente es capáz de «adivinar», por decirlo así, aspectos clave de la vida de una persona sin necesidad de tenerla presente físicamente y sin que ésta haya dicho absolutamente nada de sí misma.

Lo que ocurre es que la característica principal de un vidente es la de ver a través de la grieta del tiempo y el espacio. Presente, pasado y futuro se conjugan ante sí de forma telepática. Hay casos en que esta aptitud ha pasado a formar parte de los talentos de una persona de manera fortuita, sin haber solicitado a nada ni nadie ese poder. Es en estos casos en los que estamos ante la videncia innata.

¿Cómo se Aplica la Videncia?

El modo en que cada vidente hace uso de sus facultades es diverso. Después de todo, no por el hecho de tener ciertas facultades que a la gran mayoría de los hombres les está negada, dejan de tener libre albedrío.

Por ende, pueden decidir, como cualquier otra persona, qué es lo que quieren hacer con sus vidas. Los hay de aquellos que sólo utilizan sus facultades de videncia para amasar fortunas, o de los que viven convencidos de que existe una razón por la cual han sido favorecidos. Estos últimos, en muchos casos optarán por ayudar a los demás a encontrar el camino que ha sido trazado en sus vidas.

¿Qué Deseamos Conseguir con la Videncia?

Hemos de tener presente una alerta que no debe ser pasada por alto. Se dice que en cada uno de nosotros reside la capacidad de convertirnos en videntes. Pensando en esto, no faltarán cientos o miles de aquellos que pretendan conseguirla a toda costa. Lo que no toman en cuenta es que, si bien todos pueden alcanzarla, no todos podrán encaminarla correctamente y en lugar de ir en beneficio de dicha persona, podría acarrearle trastornos mentales. De modo que, la facultad de la videncia, en las manos equivocadas, puede llegar a ser muy peligrosa.

No obstante, para aquellos que están preparados, existen técnicas que le permitirán cultivar apropiadamente la virtud de la videncia. No olvidemos también que esta facultad no es la única a la que puede acceder el hombre; el mundo esotérico alberga más secretos que se mantienen ocultos a una humanidad que, a través de muchas generaciones, tiene que volver a cometer los mismos errores una y otra vez. En la actualidad los verdaderos videntes se hallan entremezclados con charlatanes que parecen haber nacido con la única misión de desacreditarlos.